Panaderas de Juquilita en Teopisca

Es la 01:00 de la mañana, en una casa ubicada en el barrio de Zaragoza, al pie de las escaleras de la Iglesia de la Santa Cruz. La alarma de un reloj suena: es la señal de que una larga jornada dará comienzo. Familiares y vecinas se reúnen afuera de la panadería, esperando a que el portón se abra y comenzaran a trabajar. Una taza de café caliente les da la bienvenida. La olla de café se queda prendida a fuego lento para quien quiera servirse más, la noche es joven y habrá mucho tiempo para platicar acerca de la vida y de los sueños.

Las panaderas son dirigidas por Doña Petra Zúñiga, señora muy conocida en Teopisca y sus alrededores, quien comenzó a hacer este exquisito pan desde hace 35 años. “Cuando era joven, Doña Mechita Domínguez me enseño a hacer pan. Ahora es mi hija Lilia la que me acompaña. Cada una de ellas ya sabe lo que tiene que hacer. Mi marido nos ayuda a conseguir la leña y a prender el horno. Tiene que estar en su punto para ir metiendo el pan poco a poco. Somos diez mujeres que trabajamos juntas, en todo el día hacemos unas 4,500 piezas de pan, de diferentes tamaños y unas 10,000 piezas de turrón. Terminamos de trabajar entre las 9 y 10 de la noche, dos veces por semana” – nos cuenta doña Petra orgullosa y con una bella sonrisa en su rostro.

Un altar en honor a la virgen de Juquila, se aprecia en lugar. Doña Lilia Zúñiga nos dice: “El pan y el turrón lo distribuimos en diferentes partes de Teopisca, Comitán, San Cristóbal  y Villa las Rosas. La panadería se llama así, porque mi abuelo nos llevaba desde que somos niñas a visitar a la virgen allá en Oaxaca, viajamos cada semana Santa por devoción. Es nuestra tradición familia”.

La panderia esta abierta solamente los martes y los viernes y estos días podrás visitar la panaderia Juquilita con nosotros terminando la experiencia de TALLER DE BARRO.